Inicio de Educación Cristiana

Inicio de Educación Cristiana

El domingo 15 de marzo se ha dado comienzo a las actividades de Educación Cristiana, iniciando con un desayuno para todas las edades. Habiendo compartido el mismo se presentaron los planes de Educación Cristiana y los temas a tratar en las clases, se presentó también el equipo de maestros y colaboradores que llevarán adelante la tarea durante este año 2015. Se contará con clases de niños, adolescentes, jóvenes, adultos y clase de discipulado para los nuevos creyentes. Oramos y deseamos que Dios bendiga este espacio de reflexión y estudio de La Palabra de Dios, donde cada persona, según su edad, pueda estar recibiendo “todo el Consejo de Dios”. Te invitamos y animamos a que participes con nosotros todos los domingo a las 10 hs. “…y conoceréis la verdad y la verdad os hará libre…” Juan...

El verdadero creyente

El verdadero creyente

El verdadero creyente honra a su Dios cuando ama al prójimo Hoy nuevamente nuestro mundo está siendo sacudido por movimientos religiosos, que pretenden imponer sus ideas y creencias en forma violenta y despiadada, a través de persecuciones y matanzas entre los pueblos. Ningún grupo religioso puede legitimar su fe en un Dios santo y bondadoso, apelando a la violencia, a la violación y destrucción de territorios y vidas humanas. Todo accionar violento del hombre atenta contra el propio hombre y sus derechos como tal, y contra el ser Supremo. De tal modo, todo fundamentalismo no es más que una grosera desviación del propósito mismo de toda verdadera religión: la paz y el amor entre los seres humanos. Toda religión que no pretenda la paz entre los hombres, que propenda a la destrucción del prójimo, que intente conquistar sin las sabias palabras de la persuasión, por medio de la fuerza como recurso legitimador, que esté enredada en oscuras prácticas deshumanizantes, no merece siquiera ser tenida como religión. El cristianismo es Cristo, y Cristo es amor. No hay lugar para la intolerancia, el desacato y la muerte. Todas las enseñanzas de Cristo se oponen a la destrucción en todas sus formas. Por eso, en contra de los judíos zelotes que esperaban un líder revolucionario, Jesús enseñó a poner la otra mejilla. En oposición al apóstol que le cortó la oreja a un siervo del sumo sacerdote en ocasión del arresto de Jesús, el Señor no sólo les pidió a sus discípulos que guardasen sus espadas, sino que le restauró el miembro dañado. Todo el ministerio de Jesús instó a instaurar el amor de Dios en la tierra. Jesús no sólo no produjo violencia para con la legislación judía, ya que él leía sus Escrituras, a pesar de que los fariseos le tenían por enemigo, por no comprender el significado profundo que Cristo revelaba en ellas, sino que tampoco produjo ningún daño al dominio Imperial, ya que enseñó a dar al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios. No sólo no enseñó la violencia como medio de emancipación de los pueblos oprimidos, sino que él mismo fue objeto de violencia,...

El mensaje liberador del cristianismo

El mensaje liberador del cristianismo

A lo largo de la historia, la libertad ha sido uno de los valores más importantes para los seres humanos. Se han peleado guerras, se han gestado independencias, millones han muerto luchando por ella. Libertad de esclavos, de naciones oprimidas por otras, de clases sociales, libertades civiles, libertad de conciencia, de expresión, religiosa, política, económica. La libertad tiene muchas vertientes y también contradicciones: en nombre de la libertad se han hecho demasiados daños, se ha matado y, paradójicamente, se ha oprimido a muchos. La religión no ha sido la excepción a los abusos sobre la libertad. Con argumentos como el cuidado de la sana doctrina, la pureza de la fe o el combate de los herejes, se ha anulado uno de los principios fundamentales de la misma fe: Dios nos hizo seres libres. No se trata de una libertad «ilimitada», no pudimos elegir donde nacer, ni en qué familia. Pero creo que la libertad que Dios nos ha dado, implica sobre todo, la capacidad de tomar decisiones. La libertad hace que podamos elegir; aún más, podemos elegir vivir sin Dios. Lo que no podemos elegir son las consecuencias sobre nuestras decisiones. Inexorablemente, nuestras elecciones implican consecuencias. Alguna vez una colega dijo que la salud mental consistía justamente en eso, en la capacidad de hacernos cargo de nosotros mismos. Parece que ser libres y hacernos cargo de nosotros mismos, están emparentados. No podemos ser libres haciendo cargo a otros de nuestras decisiones o nuestras «no – decisiones» (que también es una manera de decidir). He visto a hombres y mujeres superarse, y me han inspirado. Lograron vencer sus trabas y vivir con mayor plenitud. En psicología lo llamamos resiliencia. Rompieron con sus limitaciones interiores y se desarrollaron en el plano laboral o artístico; alcanzaron metas que les parecían imposibles; quebraron las barreras internas de complejos y mandatos que les impedían disfrutar más plenamente de la vida en las cosas sencillas. En definitiva, lograron un escalón superior de libertad. Mientras puedas, «vive a lo grande, amigo mío». Así decía alguien que marcó mi vida. Cuando escuchamos algo así, la primera asociación que hacemos es el dinero, los lugares lujosos, la opulencia. Nada de eso es necesario...

Reflexiones en tiempos de cambios sociales

Reflexiones en tiempos de cambios sociales

No existe peor servidumbre que la de ser esclavo sin saberlo. La libertad, en cambio, reconoce sus límites. Nada es bueno o superior por ser antiguo o nuevo. La antigüedad no garantiza nada, salvo que es antiguo. En la actualidad están dadas las condiciones para actuar sobre el hombre y convertirlo en un ávido consumidor. Deseará lo que otros han decidido que desee. El deseo se convierte en la obediencia a una orden impuesta con las sutilezas propias de la propaganda. La vista es el sentido preferido para los estímulos y el más vulnerable a las ficciones de la publicidad. El ingenuo confunde vista con visión. Los medios sociales utilizan hábilmente las tecnologías de seducción. El impacto de la imagen coacciona, anula la reflexión, invade la escena sin anunciarse. Emite órdenes gestuales de carácter subliminal. La cultura de la imagen está reemplazando a la palabra y a la relación personal, cara a cara. Simula neutralidad y pretende la hegemonía. Los dueños del poder trabajan sobre imágenes, no con ideas. Manipulan la propaganda para determinar los gustos de la indefensa masa a la que cautiva. Menosprecian el pensamiento reflexivo al que señalan como aburrido y falto de acción. Los poderosos disponen de la información y la información es poder. No queremos marcos de referencia, queremos volar como los pájaros balbucean los tutelados. El bombardeo con informaciones falaces tiene la finalidad de homogenizarnos en una masa informe. Además la gente queda entretenida y satisfecha esperando la continuidad de la serie. Solyenitzin, quien llegaba desde una sociedad dueña de la censura informativa a la sociedad agresivamente informada, que conocía por experiencia el discurso subterráneo de ambos, reclamaba por su derecho a no ser informado, Muchos medios de información, autoproclamados de “comunicación”, usan la propaganda, mientras vacían de ideas al “soberano”. Se presentan como portadores de una supuesta moral y pontifican acerca del “bien” y del “mal”. Como consideran que lo principal de la vida del hombre es de carácter posesivo, el bien es el consumo y el mal es todo cuanto impida el consumo. El asunto se limita a “poseer” y “consumir”. La propaganda estimula la creencia de que lo divertido de la vida sólo sucede en...

La historia de navidad

La historia de navidad

Hace unos años vi un pesebre de Belén de barro, muy original, que me llamó mucho la atención. Original por lo realista que era. Si no recuerdo mal, se veía a José construyendo con su serrucho una cuna, mientras la Virgen María estaba acostada con el niño a su lado y una comadrona recogía los utensilios que se habían usado en el parto. ¿Verdad que eso no es lo común en los pesebres corrientes? Estamos más bien acostumbrados a ver a un José de pie, apoyado inmóvil sobre su cayado, un niño tendido sobre las pajas, descubierto y con poco aspecto de recién nacido, y una Virgen María sentada, en actitud de oración y con una aureola de santidad, que destaca también sobre las cabezas de José y del niño Jesús. ¿De veras creemos que esa fue la estampa que se encontraron los pastores que acudieron a ver al recién nacido? ¡Que le digan a cualquier madre si a las pocas horas de dar a luz una mujer puede estar sentada como si nada, recibiendo a los visitantes! El pesebre aquél de barro reflejaba con más fidelidad la Historia de la Navidad que otros. Pero esta imagen tan irreal que siempre han presentado los pintores en sus cuadros y los belenes navideños nos plantea un problema: podemos llegar a pensar que el nacimiento Virginal de Cristo es un mito, una leyenda que no ocurrió en realidad. Que la Historia de la Navidad no es historia, sino cuento. Y nada más lejos de la intención de los evangelios que contar el nacimiento del Mesías como un cuento. “Lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos…eso os anunciamos”, dice el Apóstol Juan (1° Juan 1:1,3.). Jesucristo fue un hombre de carne y hueso, sin aureolas de santidad en la cabeza. Su alumbramiento debió ser tan traumático para él y para su madre como lo ha sido para cada ser humano. No fue un ermitaño extravagante, sino que trabajaría de carpintero, hasta que llamó a sus discípulos a dejar sus redes y seguirle. No fue una aparición que habló con voz de ultratumba, sino un hombre...

Una inauguración particular

Una inauguración particular

Hoy es una fecha muy especial. Cumplimos 85 años desde que esta familia nació como iglesia, como congregación, como un testimonio local para muchos. Nos haría bien repasar juntos aquel momento en el que el rey David dedica la ofrenda para el templo que construiría su hijo Salomón. Cuando vemos logros, sueños y proyectos concretados entendemos que ha sido con mucho esfuerzo. No solo el esfuerzo de los mayores, de los primeros… también está el esfuerzo de las generaciones de hoy, otro tipo de esfuerzo, pero es bueno reconocerlo. Me gusta estudiar este pasaje, volver a escarbar en busca de situaciones que antes no había visto. La historia nos relata el esfuerzo de un pueblo para construir un templo. Pero nos queda claro que el esfuerzo comunitario es la suma de los esfuerzos personales. ¿Qué nos dice hoy este pasaje? Construimos para el Señor (v1). Nos dice el pasaje que el rey David dijo a toda la congregación que “… el templo no será para hombre sino para Jehová Dios”. Esto es importantísimo. En un tiempo lleno de construcciones personales, de luminarias que promocionan lo nuestro, la Palabra nos redirige en este sentido a un cambio de perspectiva. Redirigir la obra, la construcción de nuestras manos. Cuando construimos en nuestro nombre, construimos Torres de Babel. No podemos olvidar que construimos para el Señor, que siempre debemos echar las redes en el Nombre del Señor. Lo que se hace en el Nombre del Señor no se hace en nuestro nombre. Juan el Bautista sabía de este principio fundamental y rector en la vida de los cristianos… “es necesario que yo mengüe y que Él crezca”. Se construye con esfuerzo (vs 3-6). El pasaje también nos relata acerca del esfuerzo. Y éste también es un principio rector de La Palabra. Nada se logra sin esfuerzo, sin sacrificio, aun cuando se hereda algo es necesario sostenerlo con el sacrificio. Vemos aquí que el proyecto de construcción del templo incluía distintos niveles de compromiso: esfuerzo personal (David), esfuerzo familiar (las casas paternas), esfuerzo del pueblo. Es interesante notar que todos estos esfuerzos eran VOLUNTARIOS, no eran obligatorios ni compulsivos. Pero en la suma final, el cronista (v.9) nos...